José... estas imágenes me han desarmado. Esa simple y limpia apariencia son un golpe seco. Sobre todo las dos últimas... ambas con un encuadre que ubica al sujeto hacia la derecha, y aún así no pesan demasiado como para que la imagen no se sostenga debidamente. La segunda... es la de mayor fuerza para mí. Es como la última de las brazadas, el intento de mantener visible algo que nos recuerde que estamos vivos. La última, pura prolongación afectiva, imprescindible. Te felicito, José. No sólo se muestran magníficamente, sino que además «dicen» demasiado. Me encantaron.
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José... estas imágenes me han desarmado. Esa simple y limpia apariencia son un golpe seco. Sobre todo las dos últimas... ambas con un encuadre que ubica al sujeto hacia la derecha, y aún así no pesan demasiado como para que la imagen no se sostenga debidamente. La segunda... es la de mayor fuerza para mí. Es como la última de las brazadas, el intento de mantener visible algo que nos recuerde que estamos vivos. La última, pura prolongación afectiva, imprescindible. Te felicito, José. No sólo se muestran magníficamente, sino que además «dicen» demasiado. Me encantaron.
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